Las mareas de esta Luna Nueva ya se anunciaron solas y las estamos viviendo: los órdenes desdibujados.
Fases del Mes Lunar (TU):
02 MAR 17:35 Luna Nueva
10 MAR 10:45 Luna Creciente
18 MAR 07:18 Luna Llena
25 MAR 05:37 Luna Menguante
Estas mareas son las consecuencias del mini-ciclo que regeneró las estructuras societales cambiando las frecuencias vibratorias desde la Luna Nueva de enero pasado y que se cerró con la última Luna Llena (16FEB2022).
Que las mareas se reflejen de manera tan nítida en la cotidianeidad, se lo destacó en la pasada Luna Nueva 01FEB2022: “Sincronizados los softwares siderales: lunares, planetarios, solares, y galácticos para las mareas de esta Luna Nueva, incluyendo cualquier movimiento, acción o suceso que se verá definido en el marco de lo pre-definido… Suena a un hito en pleno desarrollo”.
Una vez regeneradas las estructuras societales, se desdibujarán paradigmas, panoramas y planes, dejando a la deriva lo que se daba por hecho o lo que se pensaba era un orden instaurado, nadie llevará la batuta y a pesar de varios intentos para restaurar horizontes, órdenes y estructuras, lo que viene todavía está en la nebulosa. Habrán otros órdenes, otras realidades.
La Luna Menguante pasada (23FEB2022) comenzó a perfilarse ese hito en pleno desarrollo, a nivel global que duda cabe, los acontecimientos en Ucrania lo reflejan y engranan perfectamente con las realidades de los cuatro eclipses en curso.
Primero, la que esculpe surcos que se graban por mucho tiempo (19NOV2021); segundo, con la que introduce realidades por decreto o las decreta a conveniencia (04DIC2021); tercero, con la que resuelve mediante emboscadas (30ABR2022); y, finalmente cuarto, con la que desata rupturas en lo establecido (16MAY2022).
Y esto sólo es el comienzo, así lo anuncian las mareas heliocéntricas de esta Luna Nueva (02MAR2022).
Desafíos colosales para Venus y la Tierra (nosotros) ante las decisiones sin miramientos de colosos que aplastan para conseguir sus objetivos (Júpiter Neptuno, Quirón), como la de una guerra. Delirante y el señor matanza aniquilando vidas que nada tienen que ver en ese juego.
Las mareas geocéntricas anuncian que veremos claramente intentos por sostener los órdenes que ya se desdibujaron sin retorno. Grandes reuniones, alianzas y concertaciones (conjunciones Venus, Marte, Plutón), como también situaciones inesperadas (conjunción Sol, Luna Júpiter), haciendo lo que se puede para sostener lo que queda (conjunción Saturno, Mercurio). Queda la interrogante si será suficiente, sobretodo para quienes están bajo ataque en carne propia y no en las pantallas.
Los acontecimientos en Ucrania no definen la totalidad del hito en desarrollo, tan sólo se empieza a vislumbrar, pero sin duda fue suficiente para desdibujar los órdenes a nivel mundial.
¿De dónde agarrarse? De la vida. Por ahora soplando en los vientos electrizantes de la fase solar y buscando los eslabones perdidos que disuelvan la nebulosa perfilando horizontes más armoniosos que los horrores en marcha.
¿Y qué hacer con las sensaciones inundadas de desconfianza, miedo, paranoia parte de las mareas pero sin duda reales? Sintonizarlas con los vientos electrizantes que las conviertan en radares para identificar lo que retorna a la paz. No para imponer castigos que inflaman y llevaron a la guerra.
Que sean también esos vientos electrizantes los que tomen las riendas de las emociones que obviamente ante los acontecimientos y como influjo de las mareas estarán apasionadas, irreflexivas, impetuosas.
Soplar fuerzas para todos que cuando se desdibujan los órdenes la cotidianeidad también se desordena y todos necesitaremos vientos electrizantes para seguir adelante en paz.
Por último, no culpar a las mareas ni cósmicas, ni solares, ni lunares que éstas vienen como fuerzas y lo que se hace con ellas en las realidades terrestres es responsabilidad de quienes tienen el poder de convertirlas en pesadillas o paz para la vida.
Volveremos pronto.