Las mareas heliocéntricas de esta Luna Llena (16MAY 04:14TU) consumarán los cambios inesperados (interacciones Plutón-Mercurio) que trajo el rayo de Júpiter de la Luna Nueva pasada (30ABR) subvirtiendo secuencias, consecuencias y órdenes.
…lea sintiendo que no pensando…
Consumaciones que podrían ser un pasaje armonioso bajo el auspicio de las partes involucradas, conflictuadas o encontradas actuando al unísono y sobretodo sin intermediarios (conjunción Venus-Marte), para así poder zanjar los obstáculos que se presenten (interacciones con Urano que insiste en imponer su agenda).
Esto es válido también para las mareas geocéntricas que nos mostrarán situaciones encontradas que tienen menor importancia de la atribuida por terceros sin nivel de decisión (interacciones Urano, Mercurio, Sol, Luna), y, por los ataques de posesión que sólo alcanzan para atemorizar… temporalmente (conjunción Marte-Neptuno).
Se suman a inflar el poder de los obstáculos e inflamar los ánimos, las líneas de tiempo activas del Eclipse de las Rupturas (16MAY 04:12:42 TU), y, el Eclipse de las Emboscadas (30ABR 2022) todavía activo. Aquí sus energías y patrones en la historia.
Las complicaciones podrían desaparecer tomando decisiones por encima de los amedrentamientos; con decisiones por encima y al margen de intermediarios, delegados y terceros; despejando el ruido para escuchar a quienes toman decisiones y menos a quienes nos interpretan la realidad.
Y claro, actuando en tres planos, dimensiones o niveles a la vez, con las moléculas atmosféricas del espacio sideral que atravesamos, mientras damos forma a nuestra nueva fibra generatriz que sólo se hace viviéndola (1).
Las sensaciones tendrán un radar peculiarmente auténtico, distinguiendo lo original, lo real, lo que da soluciones. Las emociones, a pesar de los sustos temporales, impetuosas favoreciendo el continuo.
Volveremos pronto.
(1) La conjunción de Júpiter y Neptuno será el 6 de junio del 2022; las intensidades de esta conjunción fluirán desde el 30 de abril hasta el 5 de julio. Esto desde la mirada heliocéntrica que desde la ventana terráquea (geocéntrica) aparentemente será el 12 de abril.
Esta conjunción marca un nuevo ciclo entre Júpiter y Neptuno que se regenera cada 12.78 años. Los ciclos pasados: septiembre 2009, diciembre 1996, marzo 1984, mayo 1970, julio 1958. El próximo: 19 febrero 2034.
Cada conjunción de Júpiter y Neptuno nace una fibra generatriz nueva en el tejido social que trae su propio carácter, naturaleza o substancia. Energiza miradas, visiones, percepciones con sus propias peculiaridades. Revitaliza entendimientos, concepciones… otros lentes.
De aquí que muchos interpreten este ciclo como generacional, y si bien se aplica el “…tus hijos no son tus hijos…” de Gibrán, o, el “…viven en la casa del mañana que no puedes visitar ni en sueños…”, más que una cuestión de generación, alude a una fibra que no viene hecha ni está predefinida. De aquí también las etiquetas generacionales como boomers, milennials y otras, pero las etiquetas no definen sino las vivencias.
Es una fibra generatriz que se autodefinirá en sus experiencias sociales, donde la experiencia es la fuerza vital y sólo se la puede entender si se la vive en la interacción social. De aquí que las interpretaciones no sólo son generacionales, sino también sobre valores, sentimientos, creencias, actitudes, pero éstos son sólo consecuencias de lo vivido.
Por ello que la pluralidad de entendimientos, desentendimientos y malentendidos sobre historia, eventos o ‘lo que ocurrió’, ya que cada quien percibe a partir de sus experiencias, desde su propia fibra y con su propia mirada.
De esas interacciones sociales con fibra propia emerge la dinámica generatriz que va formando con lentes propios, y no sólo en el aspecto generacional, sino a través de los años que se interactúa en el tejido social.
Una fibra generatriz que con los lentes de lo que abarcan Júpiter y Neptuno se expande mucho más. El primero rigiendo las energías vitales que circulan, y el segundo, rigiendo las aguas en todos sus estados y en todo lado, incluyendo el 70% de nuestros cuerpos, su alcance incalculable se acerca a la totalidad y un poco de todo.